Clínicamente, la obesidad y el sobrepeso son definidos como la acumulación o exceso de grasa corporal que puede tener efectos adversos en la salud. Es crucial determinar un umbral de grasa corporal que esté asociado con un daño potencial para la salud.
Por eso, en ausencia de una medida de grasa corporal, el sobrepeso se ha medido siempre con el índice de masa corporal (1). Sin embargo, lo mejor es medir la grasa corporal. Así pues, la definición clínica de la obesidad debe ser medida entonces con el porcentaje de grasa corporal y con las herramientas adecuadas, las cuales incluyen la bioimpedancia, la resonancia magnética, tomografía computarizada y la densiometría ósea entre otras (2).
En los centros deportivos, vemos como esto ya se empieza a aplicar y se van introduciendo estas valoraciones por medio de los servicios de asesoría. Esto refleja la intención de progreso y de ir un paso más allá, aunque queda mucho por hacer.
No obstante y debido al alto coste de ciertas herramientas y la necesidad de manejo por personal especializado, lo más habitual es usar la bioimpedancia. Esta, aunque es válida, no parece la más exacta, pero es la única que no requiere un alto precio.
Referencias bibliográficas:
1. WHO. Obesity: preventing and managing the global epidemic. Report of a WHO consultation. WHO Technical Report Series 2000;894:1–253. doi: 10.1017/s0021932003245508.
2. Ho-Pham LT, Lai TQ, Nguyen MT, Nguyen TV. Relationship between Body Mass Index and Percent Body Fat in Vietnamese: Implications for the Diagnosis of Obesity. PloS one. 2015;10(5):e0127198. PubMed PMID: 26018910. Pubmed Central PMCID: PMC4446298. Epub 2015/05/29. eng.
Yo utilizo un plicómetro o adipómetro con mi compañero de Crossfit y de lujo, aunque requiere dedicarle unos 15 minutos cada uno.