¿Qué supone ser un atleta? La flexibilidad metabólica como base

Haciendo un símil automovilístico y si mi conocimiento básico de la mecánica no me engaña, podríamos decir que un atleta es como un  deportivo moderno.

A ralentí, puede ser muy eficiente, casi como un utilitario. Eso sí, cuando necesita una buena patada, sube revoluciones y quema el mejor combustible sin recelo. Por otra parte, su tubo de escape es el mejor expulsando y aprovechando residuos. Además, una vez exprimida la potencia cuando hacía falta, es capaz de enfriarse mucho antes. Como era lógico, aunque es más eficiente, necesita más combustible debido a su tamaño y potencia.

El resto, somos utilitarios con más o menos prestaciones y eso no está nada mal, es lo que hace falta.

El problema viene cuando ni siquiera llega a ese nivel. Cuando no se pueden hacer más de 100km sin que haya un calentón, o cuando se tiene que subir una pendiente apurando la tercera.

Al igual que ocurre con el parque móvil del país, el cuerpo de much@s está obsoleto y oxidado. Ahora bien, para comprar un coche más eficiente hace falta dinero, para ENTRENAR, NO!

Este año, quizá no sea el adecuado para cambiar el coche, pero siempre es el bueno para empezar a moverte más.

 

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