Con sobrecargas constantes o isoinerciales (también se conocen cómo isotónicas), nos referimos a todos aquellos ejercicios donde se acelera o frena una carga que permanece constante a través de todo el ROM (rango de movimiento). Por ejemplo, una barra o mancuerna. En todos estos casos, la resistencia que presentará la pesa para cambiar su estado de reposo o de movimiento, dependerá de su masa inercial. Es decir, cuanto mayor sea la masa de un objeto, más dificultad encontraremos para impulsarlo. Ahora bien, que la resistencia sea constante, no quiere decir que lo sea la tensión o fuerza.
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